Cómo ahorrar dinero al planificar una boda

El día de su boda no tiene precio para usted, pero puede tener un costo muy real para su cuenta bancaria. En muchas culturas, se promueven las grandes ceremonias. Incluso con esa presión, puede gastar menos sin sacrificar recuerdos especiales.

1. Elabore un presupuesto para su boda

No es la parte más romántica de planificar la boda, pero es importante establecer un presupuesto al principio del proceso y respetarlo. No olvide incluir los aportes económicos que vayan a hacer familiares (o amigos que le hayan ofrecido como regalo prestar servicios, por ejemplo, de fotografía) para determinar lo máximo que puede gastar en su boda —y de dónde provendrá el dinero—.

A partir de eso puede determinar cuánto destinar a cada tipo importante de gasto. Todos los proveedores intentarán hacer que gaste más, por lo que tener esa pauta le ayudará a evitar desembolsos adicionales que suman mucho dinero.  

No olvide elaborar un presupuesto para la luna de miel, aunque también puede volcar algunos de esos costos, como los vuelos o el hotel, a su lista de bodas. Crear un fondo para la luna de miel le permite destinar los regalos monetarios de los invitados directamente a los costos del viaje. ¡No se apresure a rechazar ofertas de ayuda!

2. Planifique para lo inesperado

Cuando esté preparando su presupuesto, no olvide dejar margen para gastos de último momento, ya sean modificaciones adicionales al vestido de boda, un problema con el catering o cambios/emergencias de último momento. Inclúyalos en su presupuesto de arriba, pero no se lo comunique a terceros (de lo contrario, intentarán que lo gaste todo en el área de especialización de ellos).

También puede considerar adquirir un seguro de bodas, si hay alguno disponible. Los beneficios varían según la póliza, pero pueden brindarle protección financiera si alguien se lastima o el salón sufre algún daño durante la ceremonia o la recepción, o reembolsarle dinero si la celebración se cancela o se pospone de manera inesperada.

3. Elija la fecha y la época apropiadas

Los costos pueden variar según la fecha y la época del año que elija para casarse. Es probable que pueda reducir la cifra si elige una fecha menos popular. Los salones de fiestas suelen ofrecer descuentos durante su “temporada baja”, si bien esto varía según el lugar, la estación del año y el país.  

De manera similar, casarse un día hábil (o incluso un domingo en lugar de un sábado) puede permitirle ahorrar más. No solo el salón puede salir más barato, sino que casarse un día de semana también puede ayudar a los invitados a ahorrar en gastos de viaje, aunque tengan que sacrificar parte de sus vacaciones. Sin embargo, recuerde que si opta por casarse un día de semana, debe prepararse para que más invitados rechacen su invitación. Pero si eso no le molesta, ahorrará incluso más con una lista de invitados no tan numerosa.

4. Busque lugares no tradicionales

Tenga en cuenta espacios poco convencionales con precios más bajos, como lugares al aire libre (por ejemplo, parques públicos o playas), propiedades en alquiler para vacaciones (si lo permite el dueño de la propiedad), museos y pequeños negocios. 

5. Elabore la lista de invitados a conciencia

Además del lugar, la cantidad de invitados que reciba puede ser lo que más repercuta en el costo general de su boda. Después de que usted y su pareja se hayan puesto de acuerdo en a quién invitar, piensen en sus pautas sobre niños e invitar a terceros. Pueden decidir que a su boda asistan nada más que adultos y ofrecer invitaciones adicionales solo a quienes se encuentren en relaciones largas. Tal vez su familia exprese algunas opiniones al respecto, pero recuerde que es su día y la mayoría de la carga financiera (en la mayoría de las culturas) recae en usted.

6. Digitalice las invitaciones

Entre reservas de fechas, invitaciones, confirmaciones de asistencia y material de papelería (como menús y marcadores de mesas), las parejas gastan mucho dinero. Para reducir los costos de papelería, considere enviar por correo solo una invitación por persona con instrucciones para responder por Internet. Ahorrará incluso más dinero si usa invitaciones digitales y solo envía invitaciones físicas a amigos y parientes que sepa que están esperándolas y las valorarán.

Eso no solo puede reducir en gran medida el gasto en papelería y franqueo, sino que también malgastará menos papel y se simplificará el proceso de respuesta. En lugar de llevar un control de cada respuesta individual, puede, por ejemplo, anotarlas en una hoja de cálculo.

7. Reconsidere la vestimenta para su boda

No hace falta que le digamos que los vestidos de boda y la ropa del novio son caros. Con una búsqueda rápida en Internet encontrará decenas de empresas que alquilan vestidos de boda.

Si prefiere comprar el vestido, considere la posibilidad de que sea usado o vintage. Y recuerde que el vestido con el que se case no tiene por qué ser “de boda”. Elija uno que le encante, bien se venda para novias o no. Además, es probable que los vestidos que no sean para bodas cuesten menos.

Comprar esmoquin y trajes para los hombres también puede ser caro. Si después del gran día no volverá a usar la ropa de su boda, es posible que pueda alquilarla y recuperar dinero. Para tener mayor seguridad, calcule cuánto cuesta comprar en comparación con alquilar.

8. Planifique sus cambios

El trabajo de sastrería y las modificaciones cuestan más dinero cuando deben hacerse rápido. Pruébese la ropa de su boda con mucha antelación para evitar viajes de último momento al sastre o la costurera. Es recomendable probarse la ropa entre dos y cuatro meses antes del evento para hacer cambios grandes, y otra vez dos semanas antes para hacer ajustes sencillos.

9. Elija flores naturales

Puede ahorrar dinero si elige opciones más naturales de flores. Las ramas y las hierbas ornamentales son más económicas.

Otra forma de ahorrar es buscar maneras de reutilizar las flores durante el día del evento. Los ramos de novia pueden usarse como centros de mesa, y las flores de la ceremonia pueden llevarse a la recepción para la mesa de bienvenida. También puede elegir otros tipos de decoración.

10. Elija opciones de comida económicas

La comida puede ser una parte importante del presupuesto de su boda. Evitar las comidas y bebidas más caras puede contribuir a mantener los costos bajo control. También puede ahorrar si ofrece un bufé o una cena estilo familiar en lugar de platillos individuales.

Si se decide por platillos individuales, una manera de reducir los costos es que los invitados elijan su comida por adelantado, para que el proveedor no tenga que preparar cada opción para todos los invitados. Otra posibilidad es ofrecer a todos los invitados el mismo platillo, con algunas opciones listas para quienes tengan alergias o gustos diferentes, por supuesto.

11. Lleve su propio alcohol 

Si el salón le permite llevar bebidas, compre su propia cerveza, vino y bebidas blancas en una tienda mayorista para aprovechar los descuentos por cantidad. Es probable que también pueda reducir costos si restringe las opciones de bebida a solo cerveza y vino, limita las bebidas blancas a un cóctel específico u opta por una barra que las venda.

12. Use su creatividad en la selección de postres

Si le gustan los grandes pasteles de boda, prepárese para pagar una factura elevada. Una opción para ahorrar es comprar un pastel más pequeño para cortar como recién casados y después servir a los invitados un pastel rectangular, cupcakes o paletas de pastel. Investigue qué hacen las personas en otros países; podría encontrar algo que le guste a un costo mucho menor y con mejor resultado.

13. Considere usar cubiertos descartables

¿Sabía que una parte importante del costo de la cena podría ni siquiera destinarse a la comida o la bebida? Los cubiertos podrían representar una parte considerable del presupuesto de su boda. Para ahorrar, puede cambiar los platos finos por vajilla desechable de lujo, que se ve de gran calidad, pero no cuesta tanto.

14. Resuelva la cuestión de fotografía con creatividad

Una imagen podrá valer más que mil palabras, pero los fotógrafos de bodas cuestan mucho. Para ahorrar dinero sin dejar de conservar los recuerdos de su boda y la recepción, busque estudiantes de fotografía en su zona, pídales a los invitados que documenten el día con la cámara de su teléfono o incluso elija cámaras desechables. Y si piensa contar con una cabina fotográfica, no le delegue la diversión a una empresa. En cambio, lleve su propia utilería (o compre o descargue imágenes recortadas por Internet) y coloque una cámara o un dispositivo con el que se pueda tomar fotos.